En Ahuachapan, 5 y 6 de abril 2008

"¿Qué ganaba con darle el número uno y la calle a Luciano, si no sabía leer?"
de Mi Planta de Naranja-Lima por Vasconcelos

Por: Victoria Cavanaugh

Este fin de semana, como ya he dirigido de nuevo en el autobús de visitar dos hogares en Ahuchapan, pasé las dos horas de viaje leyendo de una novela para una clase para la maestría. La novela, Mi Planta de Naranja-Lima, por la Brazialian autor, Vasconcelos, cuenta la historia de Zezé, un pobre muchacho que crece en una familia rota en un mundo miserable. Como uno de los más jóvenes en su familia, que demasiado a menudo se convierte en el chivo expiatorio, sufriendo los efectos de la lucha de su familia y de infortunios. Es una ficción cuenta, pero que muy probablemente refleja fielmente la realidad de la muy real demasiados los niños que crecen en América Latina. Zezé la historia, sin duda, es la historia de un sinnúmero de niños en El Salvador. Zezé outlives su miseria del mundo gracias a su potente capacidad de imaginar y de esperanza, debido a la amistad que con las formas Portuga, un rico, pero, sin embargo, un señor verdaderamente amable.

Durante el fin de semana, nos visitabamos dos hogares en la capital de la región oriental del departamento de Ahuachapán, Hogar de la Niña San José y Hogar del Niño Doctor. El hogar de la Niña San José sirve a las niñas edades 4-14 y el Hogar del Niño "Doctor sirve a los niños de un rango de edad similar. Gran parte de la visión en los hogares de visita de El Salvador, es dar al programa la oportunidad de examinar a los posibles candidatos a las becas para los próximos años. No obstante, a menudo se reunió con un cierto sentido de la incredulidad. Muchos creen que los niños que crecen en estos hogares, de hecho, simplemente no ir a la universidad. Ciertamente, las probabilidades parecen mucho en contra de la posibilidad. La mayoría de los niños entran a los hogares sin antes de la educación formal, muchos de ellos hasta bien pasada la edad tradicional de comenzar la escolarización, y, por lo tanto, cuando llegue el momento de los niños a "pasar" (por la edad), lo que hace a quinto O sexto grado, como de catorce años, se convierte en una gran hazaña en sí misma.

Así que como estaba leyendo Vasconcelos, me acordé de los chicos y las chicas que se reunieron durante el fin de semana. Como he visitado con ellas sábado por la noche, como he caminado con ellos a misa los domingos por la mañana, y luego juega con ellos un poco después, no podía dejar de preguntarse por su futuro. Son niños con una cantidad increíble de posibilidades, pero los niños que necesitan muy mal para alguien a darles "la calle y el número" de manera que puedan efectivamente realizar su potencial.

Como hemos hablado con las monjas que en la actualidad se están ejecutando los orfanatos, la manifestaron su preocupación por el apoyo educativo para los niños después de que a su vez demasiado viejo para permanecer en el hogares. Hay una gran brecha entre el quinto y sexto grado y de la universidad, y por lo tanto mucho apoyo, en todos los niveles, que se necesita para estos niños. Tienen que aprender a leer, pero creo que necesitan mucho más que las expectativas son más altas que acaba de aprender a leer.

Como Programa, hay que ver la forma de responder a esa necesidad. En los próximos meses, estaremos en desarrollo "El Caminito", una parte del Programa se centró en el trabajo con los estudiantes de secundaria en la preparación de la graduación y de la "vida" despues. . . Agradecemos sus ideas y sugerencias. . . Hacer contacto con nosotros.